Joan Oliva
Ahora que ha entrado en vigor la tasa que pagan
los huéspedes por cada noche de estancia en un alojamiento turístico en
Cataluña conviene recordar la posición de uno de los sancta sanctorum del
turismo catalán: “Los empresarios estamos con una claridad meridiana en contra
de la tasa turística”, decía hace algo menos de un año el presidente de la
cadena HUSA, Joan Gaspart.
Pero a su vez, como cabeza del ente promotor de Turismo de
Barcelona, el propio Gaspart oficialista se mostraba comprensivo con el modelo
impositivo.
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| Gaspart, en su primer posicionamiento oficial sobre la tasa turística |
En el extraño caso de Docter Jekyll y el señor Hyde, la obra teatral homónima de Robert Louis Stevenson, se resume
la psicopatología que hace que una misma persona tenga dos personalidades
totalmente opuestas. Hace referencia al Trastorno disociativo de la
identidad.
El Gaspart empresario es el mister Hyde cuando se
pone el traje institucional de una entidad de promoción turística como la de la ciudad
condal, y muta a Doctor Jekyll cuando se trata de defender los intereses
privados de su empresa y de sus colegas hoteleros. Así es como se entiende
cuando Gaspart indica que “los empresarios tendrán una presencia y una
actuación en el momento de decidir como se reparten estos dineros de la tasa a
recaudar”-
Rechazo y comprensión
Al conocerse la posición del Gobierno de de Artur Mas de
sacar adelante la tasa turística, la Confederación Empresarial de Hostelería,
Restauración y Apartamentos Turísticos de Cataluña, de la que Gaspart es su
vicepresidente, emitió de entrada una nota
disconforme con el gravamen de las estancias de los turistas. Y lo hizo también
en tanto presidente de la Confederación provincial de Barcelona. “Me adhiero
como empresario, y para ser coherente, a
este comunicado en lo que concierne a mi oposición a la tasa”
Pero “hoy no estamos en una reunión de empresarios, ni yo
represento en este caso ni a la Confederación, ni a la Federación provincial de
Barcelona, de la que soy su presidente. Y es ésta una opinión muy diferente a
la que expongo como presidente de Turisme de Barcelona (entidad en la que
participan el Ayuntamiento y la Cámara de Comercio de Barcelona)”, declaraba ante
el estupor los medios en su primer posicionamiento oficial.
Como representante institucional y no empresario privado,
Gaspart argumenta que la promoción de Barcelona necesita de los recursos
económicos necesarios para asegurar su eficacia. Además, esgrime que “tenemos
el compromiso firme de que los dineros recaudados con la tasa irán a un fondo
que servirá la promoción del turismo en Cataluña y de la ciudad”.
“Como presidente de
Turismo de Barcelona daré todo mi apoyo a que el municipio de Barcelona tenga una
situación diferenciada del resto a la hora de recibir el porcentaje de este
fondo que se ingresará a través de la
tasa turística.
50 millones previstos
Los 50 millones de euros de recaudación anual previstos se
destinarán a promoción turística y mejora de infraestructuras (no se ha
precisado cuáles y de qué tipo). Pero aquellas palabras valederas todavía hoy se
pronunciaron cuando operadores de matriz catalana como Spanair seguían operando
y perdiendo cuantioso dinero…
“Como Turismo de Barcelona sabemos que hay importantes eventos en otros
lugares de Cataluña y somos conscientes que también se pueda a través de
esta recaudación hacer frente a sus retos. Me estoy refiriendo a temas como
Ryanair, mantener la fórmula 1 en Montmeló, y asuntos relacionados con las aportaciones
de la Generalitat a líneas aéreas…” Son actividades –recordaba el Gaspart
institucional- que “benefician
directamente al resto del territorio catalán. No se puede dejar que
desaparezcan o se dejen de hacer”.
Aunque de nuevo en la piel de empresario se muestra “solidario con esos
territorios catalanes que estarán más afectados por este tributo que otros. No
es lo mismo pensar en los precios que se cobran en la Costa Brava,, la Costa
Dorada, los campings, las casas rurales, que la tarifa de los grandes hoteles
de cinco y cuatro estrellas de Cataluña...Están muy preocupados por este
impuesto.”
Y que lo digan. Desde hoy, primero de noviembre, incluso muchos de ellos asumen ese costo como propio y no lo repercutirán a los
clientes.
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